Sacando el Jametz de la vanidad

¡ABBA a ti sea la gloria y la honra!

Eterno, tú eres mi Padre que se complace en la obediencia de tus hijos y ciertamente tu voluntad es que nosotras como mujeres y embajadoras del reino, vivamos una vida decorosa y agradable delante de tu presencia. Padre, te pido que me perdones por que tuve pensamientos de seducción y vanidad al vestirme y maquillarme, y con ello insté a producir oscuridad y pecado en tu mundo. Te pido que por amor a tu nombre me des el indulto de este comportamiento tan vergonzoso, que me ayudes a encontrar la forma adecuada de lucir en mi aspecto físico, para que de esta forma refleje la luz de los mandamientos que haz puesto en mi vida y haya entonces transparencia tanto interna como externa. Reconstruye mi feminidad, aleja la falsa y frívola vanidad de mi vida la cual me tuvo presa sirviéndole. Perdón por desperdiciar mi tiempo y dinero en modificar mi cuerpo poniendo en riesgo mi vida y no siendo agradecida con lo que tú me has dado; perdóname. Corrígeme con hilos de amor traeme a tus instrucciones. Al ignorar tus instrucciones y estatutos fui arrastrada a las garras de la locura de la vanidad. PERDONAME por ser un mal ejemplo para mi familia y amigos y la sociedad en general y por fomentar la vanidad. Dame sabiduría para identificar prendas, maquillaje, decorados, joyas y perfumes de las marcas que van en contra de todo lo bueno y de buen nombre. Conviérteme en una "Eshet Jail", que tal como lo declaró el Rey Salomón en Proverbios, que al momento de vestirme y maquillarme me vean con ternura y bondad, que sea respetada y admirada por mis buenas obras. Ayudame a tener el buen gusto de vestirme para verme bella ante tus ojos. Guíame a hacer tu hija, la niña de tus ojos de la cual Tú te sientas orgulloso. Zejut Yeshua Hamashiaj, Amén veAmén.